Munich, Mercadillo Navideño

Con la Navidad tengo un poco de lío, por una parte siento una pereza terrible cuando pienso en la Navidad, resulta que en estos días lo que toca es comer y comer, con la familia, con los amigos, con los compañeros de trabajo y me parece bien, pero a mi me da mucha rabia que todo se concentre en 15 días al año y luego si te he visto no me acuerdo, se nos olvida llamar a los amigos, con los compañeros ni fu ni fá y así hasta el año que viene que volvemos a repetir la historia y por otro lado me gusta porque estamos todos juntos, me gusta cómo se transforma la ciudad con las luces, me gusta que haya gente por la calle, el olor al roscón y los escaparates que están preciosos, pensar en los regalos, que si esto para papá que le encantará, que si esto otro para... y así hasta terminar la lista.

Pues bien este año surgió la oportunidad y nos escapamos Aurora, Julia y yo a Munich a ver el Mercadillo Navideño y lo hemos pasado genial, es muy bonito y la gente lo vive en la calle, las plazas están llenas de puestos decorados que son una maravilla, de gente bebiendo el vino caliente especiado que tanto les gusta a ellos y tan poco a nosotras y los puestos de artesanía en madera, muy típico de Alemania.

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