Tenía muchas ganas de hacer esta receta por varios motivos: porque es muy fácil y se hace muy rápido, porque queda espectacular, es un plato precioso, con mucho color y lo más importante con mucho sabor y que lo mismo se puede comer recién hecho o al día siguiente que reposadito está también muy rico.
Así que vamos al lío.
Ingredientes:
3 tomates pera
1 berenjena
1 calabacín
200 gr de salsa de tomate casero o un tomate frito de buena calidad. En mi caso utilicé este tomate que es riquísimo,
Tomillo o bien las hierbas que más os gusten
Aceite de oliva vírgen extra, pimienta recién molida y sal.
Elaboración:
Lavamos bien las verduras y las secamos con papel de cocina.
En primer lugar cortamos la berenjena en rodajas finas y las ponemos en un escurridor, espolvoreamos abundante sal y las dejamos una media hora para que suden y pierdan el amargor. Pasado el tiempo la lavamos bien con agua y escurrimos.
Cortamos también el calabacín y los tomates procurando que nos queden las rodajas similares en tamaño. Si tenéis una mandolina genial pues adelantaréis tiempo, pero no es imprescindible, yo lo hice con el cuchillo y quedaron muy bien.
Como molde utilicé mi fuente roja para tartas que me encanta, ponemos la salsa de tomate en el fondo y vamos colocando las verduras de la siguiente forma: una rodaja de tomate, una de berenjena y otra de calabacín, las juntamos en nuestra mano una encima de otra y las vamos colocando en la bandeja y así vamos rellenando toda la fuente.
Terminamos con un chorrito de aceite de oliva vírgen extra por encima de las verduras, sal y pimienta y en mi caso tomillo limonero que tengo en una maceta en mi terraza.
Cubrimos el molde con papel de aluminio, de esta forma quedarán tiernas y no se nos quemarán.
Ya solo queda llevarlo al horno que previamente habremos calentado a 170º, durante una hora.
Transcurrido el tiempo sacamos el molde, quitamos el papel aluminio, subimos la temperatura a 190º y horneamos unos 20 minutos más.
Hay que ir vigilando el horneado y cuando veamos que tienen un color doradito por encima será el momento de sacarla la fuente del horno con mucho cuidado pues quema un montón.
Y ya está, un plato colorido, precioso y listo para comer.
En este enlace encontraréis la receta original, yo solo la he tomado prestada.
Dificultad:
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